El agua es un bien finito y esencial. Ante los crecientes retos del cambio climático, la sobreexplotación de acuíferos y la desigualdad en el acceso a servicios, México ha trazado una nueva hoja de ruta. Se trata del Plan Nacional Hídrico 2024–2030, expuesto por Felipe Zataráin Mendoza, subdirector general de Agua Potable, Drenaje y Saneamiento de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), durante una conferencia en el Colegio de Ingenieros Civiles de México.
La presentación del funcionario federal estuvo a cargo de Patricia Hernández Martínez, directora general de la Asociación Nacional de Entidades de Agua y Saneamiento de México (ANEAS), quien destacó la importancia de este esfuerzo federal para alcanzar el acceso universal al agua y al saneamiento.
Pilares del Plan Nacional Hídrico
En su exposición, Zataráin Mendoza abordó seis pilares clave: revisión del sistema de concesiones, tecnificación del riego, planes municipales de inversión, saneamiento de ríos, 17 proyectos estratégicos de infraestructura hídrica y el Acuerdo Nacional por el Derecho Humano al Agua y la Sustentabilidad.
Uno de los principales esfuerzos es la revisión de más de 535 mil títulos de concesión. Ya se ha avanzado en el 58%, con casos identificados de uso distinto al autorizado, especialmente en concesiones agrícolas.
Además, se realizaron más de mil 800 visitas de inspección y se han clausurado 248 tomas ilegales. La meta es recuperar la rectoría del agua para la Nación, mediante una base de datos única, mayor vigilancia y la reforma a la Ley de Aguas Nacionales.
Tecnificación del campo y seguridad alimentaria
El plan contempla tecnificar 200 mil hectáreas en 18 distritos de riego, beneficiando a más de 225 mil productores. Este cambio permitirá no solo un uso eficiente del agua agrícola, sino también liberar volúmenes para consumo humano y recarga de acuíferos en zonas como Guanajuato y el Valle del Mezquital.
Por primera vez, se elaboraron diagnósticos en los 2 mil 478 municipios del país para priorizar obras de agua potable, drenaje y saneamiento. Estos planes, vinculados al Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social (FAIS), permitirán canalizar más de 30 mil millones de pesos al sector hídrico. A la fecha, ya se registraron más de 5,000 acciones en la plataforma federal.
Saneamiento de ríos, otra meta del Plan Nacional Hídrico
El saneamiento integral de los tres ríos más contaminados del país incluye construcción y rehabilitación de plantas de tratamiento, colectores, humedales y monitoreo de calidad del agua. Esta estrategia, acompañada por acciones legales y sociales, busca devolver la salud ecológica a cuencas gravemente degradadas.
El Plan Nacional Hídrico incluye megaproyectos como acueductos (Solís-León, Agua para Colima, Ciudad Victoria), plantas desaladoras (Tijuana), presas (Puerta del Sol, Milpillas, Margarita Maza), obras en zonas metropolitanas (como Chalco y Acapulco), y programas de protección contra inundaciones en Tabasco.
Muchos ya están en ejecución o licitación, con una inversión estimada superior a los 50 mil millones de pesos, coordinada entre la federación, estados y municipios.
Para cerrar, Zataráin Mendoza destacó el Acuerdo Nacional por el Derecho Humano al Agua, firmado por diversos sectores sociales y productivos. Este compromiso colectivo contempla inversiones, ahorro, cuidado y acceso equitativo al agua como elementos esenciales para el desarrollo con justicia.
“El agua es un derecho humano, pero también un reto técnico, ético y social”, recordó el funcionario, subrayando que el éxito del plan depende de la acción coordinada de todos los actores.